Todos duermen
hasta el viento que anoche gritaba enloquecido
se ha quedado mudo
hasta el viento que anoche gritaba enloquecido
se ha quedado mudo
Desde las aguas profundas
tus ojos surgen
penetran profundamente
en la enajenada ciudad buscándome
poniéndose en contacto con lo maravilloso que queda
cuando cae la noche
penetran profundamente
en la enajenada ciudad buscándome
poniéndose en contacto con lo maravilloso que queda
cuando cae la noche
Mientras yo
en vigilia
atenta a tu búsqueda de catedrales
te observo
con la necesaria distancia de no permitir el encuentro
escrito en alguna estación de algún año
en vigilia
atenta a tu búsqueda de catedrales
te observo
con la necesaria distancia de no permitir el encuentro
escrito en alguna estación de algún año
6 comentarios:
Precioso poema, Claudia.
Es limpio, con trazo rápido, como el bosquejo de un arquitecto, que sugiere lo que está pendiente.
(Por favor, no lo observes más desde lejos!!!! déjalo que llegue!!)
Hermosos, me encantaron , muy buen blog , será un agrado seguir pasando por acá. Saludos
La necesaria distancia... se corre el riesgo de parecer duro, frío, tal vez indolente pero la vida es sólo una y hay que tener la claridad suficiente para tomar buenas decisiones y la fuerza necesaria para llevarlas a cabo. Al menos eso es lo que trato de hacer con mi vida, con cada uno de mis días.
Un abrazote Claudia.
me recordó a la reseña del mercurio al cumplir 100 años, creo.
Hola llegué aqui no sé cómo. aprovecho para saludarte y decirte que revisando tu perfil vi que tu libro favorito (entre otros) es el Diario de Ana Frank. Tal vez te sea útil saber que ese libro es una falsificación. Fue escrito por el padre de la niña (Ana). S e llegó a esa conclusión analizando la tinta con que se escribiera el original.
Saludos
me quedé pensando en la distancia... la necesaria distancia para no doler ni ser dolida... gracias por la canción de Fito y por ir a verme, saludos, c.
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