martes, enero 16, 2007

una pequeña estampa


El año que quedo atrás fue, definitivamente, un año intenso, vivo, a ratos algo urgente. La piel cayó varias veces, dejándome, en más de algún momento, la carne viva al sol..., pero ahora, en este rato... un tono y una textura seductora envuelven mi cuerpo.

Las huellas, las de entonces y las nuevas, tienen su lugar en mi territorio. Aunque no se adviertan, ahí están atrincheradas. Con todo, tengo la sensación de que resplandecen insinuantes de tanta buena y amable luminosidad que me acompaña. Las huellas y cicatrices en la piel son la memoria de mis años.

La escritura me ha tendido en otros frentes, pero ha sido una amante fértil e implacable. La inspiración ha sido diversa, maravillosamente diversa.

Entre días que van algo más rápido que yo, solo quise venir aquí a dejar una pequeña estampa que hable de estos días, tardes llenas de color y de luces, noches colmadas de risas y juegos. Ha dejar un rastro que hable del árbol que me acoge, de la plaza pequeña donde se respira un nuevo y prometedor aroma. Una pista de que continúan mis divagaciones de domingo, de que aún hago preguntas al viento cuando escucho esas canciones, de que el miedo al olvido a ratos me visita y se ríe de mi, solo que ahora yo también me río de él.

Ha dejar un indicio de mis nuevos viajes y sueños…

22 comentarios:

Marce dijo...

¡Qué alegría verte surgir de colores, con aromas, con textura!
Leer el inicio de tu posteo, es también, resumir mi vida el año pasado;un año emocionalmente intenso.
Tu presencia refleja sonrisas y confianzas, tu ausencia se siente y se palpa, pero por sobre todo los sentimientos que aquí estampas te hace siempre presente.
Un abrazo Amanda, con energía, cariño y esperanza.

Cecilia dijo...

Guapa!, ya pensaba que no volverías!!!, que al son del Galeón español, en año nuevo habrías tomado otros rumbos lejos de esta ventana al mundo...a los mundos...
Gracias por compartirte así, generosamente...

(yo sigo al ritmo del galeón español)

Quiltro dijo...

1. Supe y vine, intuí que habría algo escrito

2. Sobre las huellas del tiempo: sabrás que hay mil motivos para perderse por completo en una mujer, pero si hay algo completamente irresistible, algo que nos condena para siempre, son sus cicatrices.

3. Cabezas, respiraciones, papeles, un aire pesado de salón y lámparas gigantes de cristal. Y un hilo sutil que se mueve entre dos dimensiones, de un lado al otro del espejo, y que me permite entender por qué esos ojos muestran la sonrisa que el rostro no delata, esa profundidad de océano que se sospecha bajo una superficie en calma.

4. Suerte (tú sabes)

ETZNAB dijo...

hablas como el viento...
un gran saludo
M.

Mengana dijo...

saludos, me integro al club de lectores de amanda.

prinzesa... dijo...

te cuento de mi cambio de hogar por si quieres ir a visitarlo de vez en cuando!

http://hacerelamordeti.blogspot.com

saludos fraternales desde mi nueva casa!

pd: siempre es maravilloso comenzar nuevos viajes!

Mary Rogers dijo...

Tanta transparencia me emociona (y también me identifica a ratos). Aunque se te extraña, me gusta saber que andas por ahí recogiendo colores y sentimientos.
Abrazotes

campesina dijo...

Supongo que estás donde estás, disfrutando de aires más frescos..preparándote, como he sabido, para otros que a su modo también lo serán. Amandi, no 'habiéndote habido' por teléfono, te dejo un mensaje en el día de mi cumple....o sea, me saludo al revés..
cariños, llama a la vuelta

Anónimo dijo...

Amanda, buena y bella estampa has dejado, un abrazo.Ari

La gata que no esta triste y azul dijo...

Retomando tus esquinas.

Ricardo Torres Hormazábal "el buscarethos" dijo...

como dijo alguien por ahí, la sed de viaje, un síntoma neto de inteligencia.

viajas sóla o acompañada?

Gonzalo Villar Bordones dijo...

me gustan tus bosques y tus sueños.

Antonia Katz dijo...

Negra gracias por compartirlo con estos voyeristas jjejej

Un abrazo

MentesSueltas dijo...

Pasaba a dejar un abrazo y me retiro en silencio.

MentesSueltas

Pato Correa dijo...

Amanda:

Se siente tranquilo, dulce, aromático, tu relato, das paz, en una ciudad demasiado convulsionada, me alegro que estes en esta etapa de tu vida, mirando la sencillez, lo cotidiano, son elemntos de la naturaleza que nos permiten vivir nuestra vida con energía.

un abrazo para tí

Milton Miguel dijo...

Que dulzura, dulce, dulce, dulce ...
que alegría visitarte.
M.M.

alexandro alvarez dijo...

Es que, como en tu caso, los desgarros, tienen algo de belleza. Esos personajes son desgarrados y desgarradores y hay algo en eso... no sé bien qué es.

Un gusto leerte de nuevo y gracias por la visita.

bàrbara dijo...

Gracias por volver a mirar mi cajita,asi como tu la miras,yo volvere a viajar a tu rinconcito...
abrazos

sombra_de_mi dijo...

Muy linda tu reflexión...

Es verdad que nuesras cicatrices, marcas y heridas son e registro de nuestra vida.
Por eso hay que amarlas respetarlas, igual que las eventuales canas y arrugas...

Besos mil, gracias por tu visita.

SdM

Antonia Katz dijo...

Todo bien?

matiasfontecilla dijo...

Qué buen impulso has tomado para iniciar el año... no hay nada mejor que las cicatrices... cicatricen.

Saludos.

Gonzalo Villar Bordones dijo...

a este año nuevo, lo ha bendecido la lluvia.